jueves, 25 de agosto de 2011

Hay que saber AMAR!

Dios mio, en este tiempo de tanto silencio, sin hablar y escuchando sin escuchar tu has sabido hacerte entender y me has dado la maravillosa oportunidad de yo poder entender, hoy se que hay que saber amar, amar lo malo y lo bueno, amar lo feo y lo bonito, amar lo adverso y lo próspero, amar los que se debe y lo que se quiere, amar los que esta con nosotros y lo que no está, amar la presencia y la ausencia, amar, amar, amar y amar.
Pero sobre todo decidirse a amar hasta lo hondo, hasta el extremo, hasta que los caprichos desaparezcan y la soberbia se extinga, amar hasta poder quedar callada ante un insulto, cómo tú Señor antes de tu crucifixión; o como Pedro aceptando nuestras graves faltas y perdonándonos a nosotros mismos, hay que saber amar y el modelo lo tenemos desde siempre en tí, desde siempre en nosotros, desde siempre en el prójimo que siempre nos da la oportunidad de amar y si es tan importante Señor, por que la desechamos a cada momento, por que no comprendemos, por que somos tan tercos!



Por eso Señor te pido me enseñes a amar cada momento de mi vida, cada persona que está en mi vida, cada   situación en mi vida; Por eso Señor te pido que cada día, cada instante, cada momento me enseñes a amarte para poder amar como tú nos amaste!